Comer bien siempre es un placer. Y como un placer importante, acompaña a otros placeres como es el del turismo. En Bragança, en León, en Salamanca, poder disfrutar de una buena comida regada con un buen vino es casi una religión.
Y es que hay ciertas zonas donde la gastronomía es un referente de cara a atraer turismo y a generar ingresos para estas zonas. Por ejemplo, ¿Quién no ha oído hablar de una posta mirandesa, del botillo de El Bierzo o del hornazo charro?
Y es que comida, turismo y posibilidades de desarrollo y de generación de recursos van de la mano en nos pocas ocasiones. Por ejemplo, el marisco de Huelva, el vino de Porto o la paella valenciana han ganado renombre internacional.
¿Por qué no podemos nosotros impulsar alguno de nuestros productos estrella no para consumo exterior, sino para que además vengan a consumirlo a nuestra tierra?
Banquetes de boda
Tradicionalmente las bodas, en los últimos años, suelen ser acontecimientos que lejos de implicar a toda la comunidad se han reducido al aspecto familiar y a una comida o cena en un restaurante de categoría en nuestro país.
Mientras más urbanos, más restaurantes de postín. Pero esto no es así en otras zonas de la península. Un ejemplo lo tenemos en Madrid, donde una finca de bodas es sinónimo de boda de alcurnia y donde los invitados se dedican a pasear, relajarse, tomar algo y cenar abundantemente mientras cohabitan en un espacio semirural.
Otro ejemplo es Barcelona. El catering de bodas se enfoca en estos momentos hacia las masías, casas típicas catalanas que han sido reconvertidas en restaurantes de zonas rurales para dar un servicio similar al de las fincas en Madrid.
Un enlace lo podemos ver en fincas de bodas en Madrid.
Aplicación a León, Ponferrada o Bragança
Imaginemos una boda en Bragança. Imaginemos que tenemos unas localizaciones tradicionales en el entorno breganciano reconvertidas en hoteles-restaurantes donde perfectamente se pueden realizar estos esponsales, pero también comidas de empresa o simplemente enfocarlos a grupos de turistas.
Para el Nordeste Transmontano puede ser un auténtico empuje en materia de desarrollo turístico, algo similar a lo que puede dar en El Bierzo con las pallozas o el León con otro tipo de construcciones tradicionales.
Vamos desde RT Nordeste a hace hincapié en todas las posibilidades que presentamos en materia turística, económica, y sobre todo, en relazan desde Braganza, Miranda, León o Salamanca todas las acciones posibles para que esta zona, tradicionalmente olvidada en la península ibérica, pueda relanzarse hacia el futuro.
El turismo gastronómico, el turismo enológico, es un campo en el que tenemos mucho que decir.